A DIOS LO QUE ES DE DIOS
"Respondiendo Jesús, les dijo: Dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios."
Mateo 12:17
Con estas palabras el Señor hizo una radical separación entre el tributo al emperador romano y el tributo a Dios; entre lo que se le da al mundo y lo que se le da a Dios; entre el reino del mundo y el reino de Dios.
Todo reino tiene un rey, unos súbditos y unos tributos que permiten sostener y expandir sus límites. Dios le pide a su pueblo que le dé lo que es de Él para el sostenimiento de su obra, teniendo en cuenta que su reino debe ser una prioridad para aquellos que hacen parte del mismo.
"Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas." (Mateo 6:33).
¿Y cómo damos tributo a Dios?
Cuando ejercemos una buena mayordomía.
La mayordomía es el estilo de vida de una persona que reconoce y acepta el señorío de Jesucristo y trabaja en sociedad con Él, actuando como su agente en la administración de sus negocios en la tierra.
EL REINO DE DIOS REQUIERE DE RECURSOS ECONÓMICOS
La iglesia se halla ocupada en la misión más grandiosa debajo del cielo, que es la expansión del Reino de Dios.
Al hablar de la consolidación de la obra, hablamos de expandir el Reino y algo muy importante es la administración de las finanzas. La historia de la iglesia en Colombia nos indica que uno de los aspectos que impulsó la obra fue el reconocimiento del plan financiero de Dios y la colaboración económica de las iglesias para dicho fin.
Él nos ha llamado a participar de su proyecto y nuestra participación en el Reino se traduce en tres acciones: Orar, evangelizar y contribuir económicamente a través de 2 formas: El Diezmo y la Ofrenda.
¿QUÉ ES EL DIEZMO?
En su sentido literal, es la décima parte de todos los frutos adquiridos, que se debe entregar a Dios como reconocimiento de su dominio supremo (Levítico 27:30-33).
Tanto en el hebreo como en el griego, significan el "pago o dádiva de una décima parte o porción." Es la décima parte de la renta de una persona. De cada diez uno, o sea el 10%.
En su sentido teológico, el diezmo es la ley espiritual que la aplican las personas que reconocen que Dios es soberano y dueño de todo lo que poseen.
EL ORÍGEN DEL DIEZMO
Época patriarcal
En época de Abram o de los patriarcas ya se practicaba el diezmo, cuando ni siquiera se había establecido el sacerdocio levítico, ni la ley de Moisés. (Génesis 14:17-24).
Abram no pagó el diezmo porque una ley así lo determinara, sino por gracia, por fe, por agradecimiento al Dios altísimo; esta acción del patriarca provocó que sus descendientes (Isaac y Jacob), lo entendieran como un deber, con lo cual honraban a Dios. Los mandamientos o pactos eran una sucesión de padres a hijos y aseguraban bendición para la familia y el pueblo. Con razón el bisnieto de Abram, José, fue hallado fiel administrador y todo lo que tocaba era prosperado.
Época de la ley
La ley apareció 430 años después de Abram.
La ley no inventó los diezmos, solo los reglamentó. (Levíticos 27:30-33).
En el Nuevo Testamento
Algunos aducen que el Nuevo Testamento no habla, ni autoriza el diezmo. Sin embargo el diezmo en el Nuevo Testamento es una ordenanza implícita.
El Señor Jesús reconoció el diezmo (Mateo 23:23).
Él no reprendió a los líderes religiosos por diezmar, sino por dejar de hacer las cosas más importantes, a pesar de que diezmaban. Más aun, Jesús dijo claramente: "esto era necesario hacer (lo más importante de la ley), sin dejar de hacer aquello (diezmar).
En esta enseñanza, el Señor está hablando de la forma correcta de diezmar, lo cual no consiste sólo en traer la ofrenda que se ha de presentar ante Dios, sino en respaldar esa práctica con una vida llena de virtudes que son el todo de una correcta relación con Él: La justicia, la misericordia, la fe y el amor de Dios.
Los apóstoles nunca cuestionaron la ley del diezmo, como sí lo hicieron con otras prácticas de la ley como los días de reposo y la circuncisión. Más bien Pablo enseñó a las iglesias a dar para la obra, y particularmente para aquellos que predican el evangelio. (1 Corintios 9:7-14).
El escritor de los Hebreos nos habla acerca del diezmo que Abram entregó a Melquisedec (tipo de Cristo), y agrega: "Y aquí ciertamente reciben los diezmos hombres mortales; pero allí, uno de quien se da testimonio de que vive (Hebreos 7:8).
Así como Abram entregó el diezmo a Melquisedec, el sacerdote del Dios Altísimo, también los creyentes del nuevo pacto le entregan sus diezmos a Cristo, nuestro Sumo Sacerdote según el orden de Melquisedec: (Hebreos 5:9-10; Hebreos 7:1-22).
La ley tuvo un período, apareció y desapareció, nosotros somos mayordomos de Dios, antes de la ley, durante la ley y después de la ley, todo sigue siendo de Dios, porque Dios no cambia. (Malaquías 3:6).
¿DE QUIEN ES EL DIEZMO?
La Escritura nos dice que el diezmo es santo al Señor, simbolizando el hecho de que Dios es el dueño de todo. Se le debe devolver, por cuanto le pertenece a Él. Cuando Dios pide nuestros diezmos no apela tanto a nuestra gratitud ni a nuestra generosidad, sino a nuestra obediencia. Diezmamos porque Dios lo ha mandado.
Así que no se trata de que le demos de nuestro dinero a Dios, sino más bien de que le devolvamos lo que le pertenece a Él.
NATURALEZA DEL DIEZMO
Ø Es santo
Ø Es una cifra precisa
Ø Es una ley universal: lo han practicado muchas personas.
Ø Es una ley particular: cada persona debe practicarla
Ø Es una ley espiritual: trasciende a la ley mosaica. (Hebreos 7:1-10)
Ø Es un acto de obediencia. (Deuteronomio 14:22-23)
Ø Es un acto de Amor
Ø Es un acto de adoración
Ø Es un acto de reconocimiento a la soberanía de Dios
Ø Es un acto de fe
¿PARA QUIEN ES EL DIEZMO?
Para el sostenimiento de la obra de Dios. (Números 18:20-21), (Malaquías 3:6-10). El alfolí, era la despensa donde se traían los diezmos en especie.
EXCUSAS DE LOS QUE NO DIEZMAN
Ø Son de la ley no de la gracia
Ø No me alcanza
Ø Estoy en crisis
Ø No tengo control de mis finanzas
Ø No soy organizado
Ø Es para el pastor
Ø Inconstancia
Ø Tengo necesidades urgentes
Ø Yo doy ofrendas
Ø Yo divido el diezmo
Ø Tengo una familia numerosa
Ø No tengo
EL DIEZMAR ES UN PRIVILEGIO
Ø Es un privilegio de los que escogen ejercer su fe para dar.
Ø Es lo aconsejable por ser bíblico.
Ø Es equitativo: Pone a los creyentes a la misma altura. El que gana poco o mucho, todos dan en la misma manera.
Ø Es lo que Dios dice
Ø Es lógico: Dios es experto en finanzas. ¿Tú crees que Dios te recomendaría algo malo?
Ø Es una expresión de fe
¿QUÉ ES LA OFRENDA?
Dádiva o presente que se ofrece con respeto, gratitud o amor
Es la manifestación externa de una actitud interna.
Beneficios de la ofrenda
La ofrenda es una inversión (Proverbios 19:17)
La ofrenda es una siembra (2 Corintios 9:6)
Clases de ofrendas
Las primicias: lo primero de lo producido (Proverbios 3:9)
Los votos: son una promesa de fe (Eclesiastés 5:4)
Diferencia con el diezmo
El diezmo es una cifra exacta que Dios reguló: la décima parte
La ofrenda es una cifra espontánea que damos
El diezmo es un acto de obediencia
La ofrenda es un acto de amor y gratitud
Los diezmos deben ser depositados en el alfolí
Las ofrendas pueden tener varios usos o destinos
El principio de ofrendar
En Israel, el tabernáculo, y más tarde el templo, fueron construidos gracias a las ofrendas voluntarias, esto es las que se entregaban con corazones dispuestos (Éxodo 36:2-7; 1Crónicas 29:14). Además había ofrendas especiales que cubrían los gastos de mantenimiento de esos lugares de culto. (Éxodo 30:12-16; 2 Reyes 12:4-5; 2 Crónicas 24:4-13; Nehemías 10:32-33).
En los días de la iglesia primitiva los creyentes vendían sus propiedades y la ponían a los pies de los apóstoles. Bernabé dio el 100% a la obra del Señor. Daban más allá de sus fuerzas y no había necesitados en medio de ellos. Los que robaban, morían como Ananías y Safira.
El ejemplo de Macedonia
Otros les pedían al apóstol Pablo les concediera el privilegio de ofrendar (2 Corintios 8:4)
Los cristianos macedonios estaban afrontando una gran pobreza, sin embargo, ofrendaban liberalmente. Habían aprendido la obediencia en la cuestión del ofrendar.
El decálogo del dador alegre
1. Dar con regularidad (1 Corintios 16:1-2).
2. Dar individualmente (1 Corintios 16:2)
3. Dar en medio de la pobreza (2 Corintios 8:1-3; Lucas 21:1-4)
4. Darse uno mismo primero (2 Corintios 8:5)
5. Dar como una gracia (2 Corintios 8:7; 1 Corintios 1:5)
6. Dar como prueba de sinceridad (2 Corintios 8:8)
7. Dar imitando al Señor (2 Corintios 8:9)
8. Dar voluntariamente (2 Corintios 8:12; 1 Crónicas 29:9)
9. Dar generosamente (2 Corintios 9:5)
10. Dar con alegría (2 Corintios 9:7)
CONCLUSIÓN
No se coma la llave que abre la ventana de la bendición (Malaquías 3:6-12)
- Para diezmar y ofrendar hay que estar convertido. 3:6-7
- El que no diezma y ofrenda está robando a Dios 3:8-9
- Dios quiere que lo probemos en eso. 3:10
- Se abrirán las ventanas de los cielos y habrá bendición sobreabundante. 3:10
- El Señor reprenderá al devorador. 3:11
- Los pueblos conocerán nuestra prosperidad. 3:12
Las finanzas en el Reino de Dios se manejan diferentes a las finanzas humanas.
- En el reino Dios es: Dad y se os dará
- Las matemáticas de Dios son diferentes - Dios multiplica por cero y le da resultado.
- El mundo dice, mientras más tienes, más vales, pero la palabra de Dios dice, mientras más das más recibes.
- En el mundo se dice ver para creer, en el reino si crees verás.
- El mundo dice que cien son más que noventa, pero la palabra de Dios dice que noventa es más que cien, refiriéndonos, por supuesto, al dar el diezmo.
Nuestra mayordomía se reflejará en la eternidad (Lucas 16:10-13).
Toda mayordomía cristiana tiene como fin el alcanzar a las almas pérdidas y edificar a la iglesia del Señor.
Hno. Gerardo Murillo Rodas
ADONAY ROJAS ORTIZ
Pastor IPUC
http://www.adonayrojasortiz.blogspot.com/
