Iglesia Pentecostal Unida Latinoamericana Baltimore, MD. Martes 31 de Marzo de 2020
SÓLO DIOS
No me desampares, Jehová; Dios mío, no te alejes de mí. (Salmo 38.21)
¿Algún parecido con la realidad de estos días?
Leyendo este salmo uno puede observar a un hombre enfermo, rechazado por los demás que piensan que, si se acercan a él, pueden contagiarse de la enfermedad: Mis amigos y mis compañeros se mantienen lejos de mi plaga, y mis cercanos se han alejado. En la cosmovisión veterotestamentaria había una relación directa entre la enfermedad y el juicio divino, por lo que el salmista revela su sentimiento de culpa al sentir que su precaria salud es un reflejo de su estado espiritual. Así que física, espiritual, y emocionalmente este hombre no se encuentra bien. La única esperanza del salmista está entonces en la capacidad de Dios para responder frente a las calamidades del hombre: Porque en ti, Jehová, he esperado, tú responderás, Jehová, Dios mío. ¡Apresúrate a ayudarme, Señor, salvación mía! Sólo Dios puede parar esto. DLB
¡Que el Señor Jesucristo nos regale a todos un hermoso día hoy!
Gracia y Paz
Adonay Rojas Ortiz
Pastor
7869853401
8301 Liberty Rd,
Windsor Mill, MD 21244
Domingos 8 AM Y 2 PM
https://www.facebook.com/pentecostalesdebaltimore/
pentecostalesdebaltimore@gmail.com
-- SÓLO DIOS
No me desampares, Jehová; Dios mío, no te alejes de mí. (Salmo 38.21)
¿Algún parecido con la realidad de estos días?
Leyendo este salmo uno puede observar a un hombre enfermo, rechazado por los demás que piensan que, si se acercan a él, pueden contagiarse de la enfermedad: Mis amigos y mis compañeros se mantienen lejos de mi plaga, y mis cercanos se han alejado. En la cosmovisión veterotestamentaria había una relación directa entre la enfermedad y el juicio divino, por lo que el salmista revela su sentimiento de culpa al sentir que su precaria salud es un reflejo de su estado espiritual. Así que física, espiritual, y emocionalmente este hombre no se encuentra bien. La única esperanza del salmista está entonces en la capacidad de Dios para responder frente a las calamidades del hombre: Porque en ti, Jehová, he esperado, tú responderás, Jehová, Dios mío. ¡Apresúrate a ayudarme, Señor, salvación mía! Sólo Dios puede parar esto. DLB
¡Que el Señor Jesucristo nos regale a todos un hermoso día hoy!
Gracia y Paz
Adonay Rojas Ortiz
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