Iglesia Pentecostal Unida Latinoamericana Baltimore, MD. Jueves 12 de Marzo de 2020
SHEMÁ
Vino Jehová, se paró y llamó como las otras veces: —¡Samuel, Samuel! Entonces Samuel dijo: —Habla, que tu siervo escucha. (1 Samuel 3.10).
Oír, escuchar, y obedecer.
En español una cosa es percibir con el oído los sonidos, oír; otra cosa es prestar atención a lo que se oye, escuchar; y otra cosa es cumplir con la voluntad de quien manda, obedecer. Pues resulta que en el hebreo, idioma en que originalmente fue escrito el texto que leemos hoy, se usa una misma palabra para oír, escuchar, y obedecer: שֶׁמַע [shemá]. Lo que Samuel está diciendo al Señor prácticamente es "Manda, que estoy listo para obedecer." Para decir esto con sinceridad debemos aceptar nuestra posición de siervo, hay un Señor, alguien a quien obedecer. La oración más famosa de los judíos lleva ese nombre Shemá, y nos lo dijo Jesús, ese es el principal mandamiento: Oye [escucha, obedece], Israel: el Señor nuestro Dios, el Señor uno es. No es difícil obedecerle al reconocer que sólo existe un Dios y Señor. Digamos como Samuel.
¡Que el Señor Jesucristo nos regale a todos un hermoso día hoy!
Gracia y Paz
Adonay Rojas Ortiz
Pastor
7869853401
8301 Liberty Rd,
Windsor Mill, MD 21244
Domingos 8 AM Y 2 PM
https://www.facebook.com/pentecostalesdebaltimore/
pentecostalesdebaltimore@gmail.com
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SHEMÁ
Vino Jehová, se paró y llamó como las otras veces: —¡Samuel, Samuel! Entonces Samuel dijo: —Habla, que tu siervo escucha. (1 Samuel 3.10).
Oír, escuchar, y obedecer.
En español una cosa es percibir con el oído los sonidos, oír; otra cosa es prestar atención a lo que se oye, escuchar; y otra cosa es cumplir con la voluntad de quien manda, obedecer. Pues resulta que en el hebreo, idioma en que originalmente fue escrito el texto que leemos hoy, se usa una misma palabra para oír, escuchar, y obedecer: שֶׁמַע [shemá]. Lo que Samuel está diciendo al Señor prácticamente es "Manda, que estoy listo para obedecer." Para decir esto con sinceridad debemos aceptar nuestra posición de siervo, hay un Señor, alguien a quien obedecer. La oración más famosa de los judíos lleva ese nombre Shemá, y nos lo dijo Jesús, ese es el principal mandamiento: Oye [escucha, obedece], Israel: el Señor nuestro Dios, el Señor uno es. No es difícil obedecerle al reconocer que sólo existe un Dios y Señor. Digamos como Samuel.
¡Que el Señor Jesucristo nos regale a todos un hermoso día hoy!
Gracia y Paz
Adonay Rojas Ortiz
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