Iglesia Pentecostal Unida Latinoamericana Baltimore, MD. Miércoles 27 de Enero de 2021
HERENCIA
En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad. (Efesios 1.11)
Somos herederos de Dios y coherederos con Cristo.
Cuando el padre que tenía dos hijos le dio su herencia al hijo menor, él se fue y la malgastó, así que ya no le quedaba herencia, lo que había en la casa de su padre le pertenecía a su hermano. Este verso empieza dejando bien claro que es en Cristo en quien tenemos herencia. Es en Él y solo en Él que podemos disfrutar de todas esas bendiciones espirituales. Tres versículos más adelante Pablo va a mencionar que el Espíritu Santo es un adelanto, las arras, de esa herencia que hemos obtenido en Cristo. Y el escritor de la carta a los Hebreos nos habla de una mejor y perdurable herencia en los cielos. Pensemos entonces en lo que nos espera, si, por ejemplo, sentir la presencia de Dios ahora, si hablar en lenguas por el poder del Espíritu Santo, si ver milagros y maravillas por la operación de los dones del Espíritu, nos parece glorioso, pensemos en lo que nos espera. Pedro habla de una herencia incorruptible, incontaminada e inmarchitable, reservada en los cielos para vosotros. Espere.
¡Que el Señor Jesucristo nos regale a todos un hermoso día hoy!
Maranatha…
¡Gracia y Paz!
Adonay Rojas Ortiz
Pastor
7869853401
https://www.facebook.com/pentecostalesdebaltimore/
https://www.youtube.com/c/ipulbaltimore/
pentecostalesdebaltimore@gmail.com
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HERENCIA
En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad. (Efesios 1.11)
Somos herederos de Dios y coherederos con Cristo.
Cuando el padre que tenía dos hijos le dio su herencia al hijo menor, él se fue y la malgastó, así que ya no le quedaba herencia, lo que había en la casa de su padre le pertenecía a su hermano. Este verso empieza dejando bien claro que es en Cristo en quien tenemos herencia. Es en Él y solo en Él que podemos disfrutar de todas esas bendiciones espirituales. Tres versículos más adelante Pablo va a mencionar que el Espíritu Santo es un adelanto, las arras, de esa herencia que hemos obtenido en Cristo. Y el escritor de la carta a los Hebreos nos habla de una mejor y perdurable herencia en los cielos. Pensemos entonces en lo que nos espera, si, por ejemplo, sentir la presencia de Dios ahora, si hablar en lenguas por el poder del Espíritu Santo, si ver milagros y maravillas por la operación de los dones del Espíritu, nos parece glorioso, pensemos en lo que nos espera. Pedro habla de una herencia incorruptible, incontaminada e inmarchitable, reservada en los cielos para vosotros. Espere.
¡Que el Señor Jesucristo nos regale a todos un hermoso día hoy!
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